¿Cuántas veces en el aula, presencial o en línea, explicamos una tarea que teníamos clara en nuestra mente, damos las instrucciones paso a paso, pero observamos caras de confusión entre nuestro alumnado? ¿Cuántas veces explicamos una actividad que pensamos que los estudiantes entienden pero que, luego, una vez se ponen manos a la obra, observamos que no era así, que cada estudiante parece haber entendido algo diferente ante una misma consigna? La manera en la que ofrecemos las instrucciones en el aula influye directamente en el éxito o no de una actividad y en que ésta se convierta en una buena experiencia de aprendizaje. Esto cobra especial importancia en los entornos en línea, en los que las personas no siempre coinciden en un mismo lugar y en un mismo tiempo y por tanto no siempre existe ese espacio para preguntas, ejemplos, aclaraciones o simplemente para observar las caras de confusión o comprensión de nuestros estudiantes. Una de las claves para que una actividad tenga éxito, la clase “salga bien”, para que fluya, es decir, para que todo el alumnado se involucre en ella, es ofrecer unas instrucciones claras y efectivas en el aula. Te esperamos en este taller para compartir estrategias y recursos para el aula.